Los web bot son una tecnología que existe desde hace más de cincuenta años cuando aún no había Internet, sin embargo, no ha sido hasta el día de hoy que comienzan a verse sus virtudes gracias a la combinación de la digitalización y las redes sociales.
Lo primero que debemos pensar es que los chat o web bots están de moda, todas las empresas comienzan a usarlos con más frecuencia y se ven en todos los sectores. Desde las grandes tecnológicas (Apple, Google y Facebook) pasando por las empresas de automoción, hasta las de telecomunicaciones y pequeñas y grandes agencias publicitarias. En definitiva, todo el mundo los usa.
Para entender las posibilidades y el potencial de un web bot para las organizaciones, lo primero es saber cómo funciona. La labor de un web bot es entablar una conversación con una persona, por ello, las redes sociales son el espacio natural par comenzar este diálogo.
Lo bueno del momento actual es que muchas de las limitaciones de los web bots han desaparecido. Gracias al desarrollo tecnológico y el avance de la IA (Inteligencia Artificial), en especial, mediante el uso de sistemas en la nube como IBM Watson los web bots se han confirmado como una solución empresarial y un aliado en las estrategias del marketing digital.
Redes sociales y web bots
Un claro ejemplo del potencial de un web bot es Facebook. La empresa de Mark Zuckerberg ofrece un motor que se ha utilizado para crear decenas de miles de web bots en su plataforma cada día. Su función, entre otras, es la de ofrecer o vender servicios.
La combinación de un web bot con las redes sociales permite determinar en qué punto del proceso de ventas estamos. Nos ayuda a seleccionar la mejor técnica estratégica para mejorar nuestros resultados económicos.
Pero también aporta valor y ofrece soluciones para determinar en qué punto del proceso estamos. Por ejemplo, podemos saber cuándo se establece una venta y establecer soluciones en el caso de que no se produzca.
Por ello, es fundamental cuál es el mejor ciclo de venta (preventa, venta o post venta). Una vez sabemos dónde estamos es hora de establecer los parámetros con el web bot para mejorar la atención al cliente.
Aunque lo habitual es estar en las redes sociales principales, es importante conocer la razón de ser de cada uno y su público objetivo. Por ejemplo, LinkedIn es para uso profesional, Facebook es generalista, Instagram es para el público joven y Twitter para medios de comunicación y marketing.
Una vez entendido las diferentes redes seleccionamos nuestro público y audiencia y configuramos el bot con objetivos reales para que establezca una conversación real con los usuarios previamente escogidos.
Después dotamos al web bot de funcionalidad para que entienda a los usuarios. De esta forma, ya puede comenzar a comunicarse con ellos (y vender nuestros productos y servicios) a través de las redes sociales. Piensa que el usuario puede abandonar la conversación en cualquier momento, por ello, es importante cómo nos comunicamos con el.
Si conseguimos que se quede en el chat y nos haga preguntas sobre nosotros tenemos media venta realizada, y todo ello gracias a una simple herramienta, un web bot. La clave es usar la tecnología que nos aporta la IA como IBM Watson y aprovecharlos en nuestro beneficio.
En definitiva, si quieres mejorar tus ventas y resultados, no lo dudes y utiliza un web bot ¡Ya verás como no te arrepentirás!