¿Cuándo fue la última vez que revisaste el estado de los clientes de tu empresa? Puede que ya no lo recuerdes.
Si no tienes la capacidad de responder preguntas como: ¿Cuántos clientes tiene mi negocio? ¿Cuántos están activos? ¿Cuál es el valor de cada uno para mi empresa? ¿Qué clientes se han quedado atrás?, es momento de considerar los sistemas de administración de datos de tu empresa.
La importancia de los datos
Los datos derivan etimológicamente de la palabra latina datum, que se traduce aproximadamente como "algo dado". Los datos son, esencialmente, los hechos y estadísticas simples que se recopilan durante las operaciones comerciales de la empresa. Son crudos, desorganizados, no analizados, ininterrumpidos y no relacionados, y son utilizados en diferentes contextos. Por ejemplo, hechos y estadísticas recopilados por investigadores para un análisis pueden denominarse colectivamente datos.
Sin embargo, los datos, en esencia, carecen de fervor informativo a menos que se les dé un propósito o una dirección para adquirir un significado. En este sentido, se pueden utilizar para medir o registrar una amplia gama de actividades comerciales, tanto internas como externas. Si bien los datos en sí mismos pueden no ser muy significativos, son la base de cualquier informe y, como tal, son vitales para un negocio.
La importancia de los datos de clientes
Si volvemos al ejemplo del inicio de este artículo, debemos entender a los datos del cliente como las métricas provenientes de la interacción de la empresa con el o los clientes, como el número de operaciones, el número de ofertas, los ingresos recibidos, los gastos realizados o las incidencias, por ejemplo. Para comprender las interacciones con nuestros clientes, necesitamos datos.
Cuando esos datos se analizan, estructuran y se les da forma o contexto para que sean útiles, encontramos información, palabra que, etimológicamente, en el francés medio y antiguo significaba "el acto de informar". En esencia, la información es sistemática, filtrada y útil; es el resultado de analizar e interpretar piezas de datos. Mientras que los datos son figuras, números o gráficos individuales, la información es la percepción de esos conocimientos.
Datos versus información
“ The goal is to turn data into information, and information into insight.” Carly Fiorina
Los datos son hechos y estadísticas en bruto, mientras que la información son datos precisos y actuales, concretos y organizados para un propósito específico, presentados en un contexto que le da significado y relevancia y pueden conducir a un aumento en la comprensión y una disminución en la incertidumbre. Otra forma de mostrar información es con datos que han sido interpretados y luego presentados en un contexto más significativo que permite que una empresa tome decisiones a partir de ellos.
La información solo existe con datos, pero los datos no dependen de la información.
La importancia de la información
La importancia clave de la información es que permite que una organización tome decisiones informadas al presentar los datos de una manera que la gerencia pueda interpretar. Sin embargo, su valor no radica solo en la información misma, sino en las acciones que resultan de dicha información. Para eso, el proceso de presentación de informes debe ser parte de un proceso de revisión más amplio dentro de la organización para obtener los mejores resultados.
Con el dominio de la tecnología en el mundo de los negocios, los datos generados por las empresas están alcanzando un máximo histórico: se dice que somos capaces de crear 2.500.000 TB de datos por día.
Los datos juegan un papel importante para las empresas, desde proporcionar métricas hasta información financiera u operativa sobre la eficiencia del negocio. Pero, a medida que nos movemos más rápido e interactuamos como nunca antes, comprender qué significan estos datos y cómo podemos usarlos para mejorar los resultados de nuestro negocio es absolutamente fundamental.
El marketing y los datos
Cuando se trata de datos, se tiende a olvidar que los hechos se basan en la perspicacia. Un número es solo un número sin la intervención de la percepción. ¿Cómo hacer que un número tenga sentido? Desde una perspectiva de marketing, la intuición puede conducir a algunos resultados creativos sorprendentes, pero sin datos, puede hacer poco para impulsar el cambio comercial.
¿Alguna vez has notado que buscas camisas nuevas en Internet y luego te aparecen anuncios de esa empresa o producto? Este es un gran ejemplo del uso de datos a escala para mostrar automáticamente ofertas en las que ha mostrado interés en el pasado, y funciona. Las estadísticas muestran que el marketing dirigido tiene tasas de conversión y retención mucho más altas que los esfuerzos de marketing tradicionales, y todo esto es posible gracias a los datos asociados al cliente.
Los datos están en todas partes: el desafío es identificar y extraer los datos correctos para su organización. El 50 % de las pequeñas empresas dice que no tiene una estrategia de datos clara, otro 47 % cita preocupaciones sobre políticas y privacidad; el 40 % cree que las consultas a la base de datos tardan demasiado, mientras que el 42 % no tiene ROI. Para resolver esto, es importante comprender qué datos son relevantes para su empresa y sus objetivos comerciales.
Los datos son importantes para tomar decisiones: 14 razones
- Permiten tomar decisiones más seguras
- Reducen el riesgo
- Ayudan a ahorrar costes y aumentar la eficacia
- Garantizan transparencia en los procesos
- Fomentan las decisiones basadas en hechos
- Aumentan la proactividad en las decisiones
- Disminuyen el sesgo en las decisiones
- Las decisiones estratégicas se convierten en una práctica común
- Hacen que sea más fácil mirar hacia atrás, medir y evaluar
- La toma de decisiones ágil y flexible se vuelve posible
- Permiten construir procesos estándar repetibles
- Las estadísticas y tendencias no mienten
- Abren un camino a analizar mejores decisiones futuras
- Hacen que la toma de decisiones sea más transparente y objetiva
Cómo ser una organización data-driven
Ser una organización data-driven significa gestionar con datos nuestras decisiones de negocio, clientes y empleados. Según el último estudio de madurez data-driven de las empresas realizado por la consultora INCIPY en 2022, solo el 17% de las empresas españolas son data-driven, y de ellas, solo el 8% aplica modelos de analítica avanzada.
Para saber si tu compañía es data-driven, debemos identificar el grado de madurez de la empresa e integrar e implementar la tecnología y estrategias necesarias para mejorarlo. No existe una estrategia única: la experiencia y el conocimiento son las claves para llevar a cabo acciones que mejoren el grado de madurez de la compañía para ver resultados.
Convertirse en una organización data-driven implica una “colaboración” entre las corporaciones y sus mercados mediante el intercambio de datos. Lo cierto es que es poco común encontrar empresas que saquen pleno rendimiento de los datos que recolectan. La automatización, recolección e interconexión de estos datos es clave, pero los desafíos a nivel organizacional son igual de importantes (o incluso más).
Ser data-driven implica medir y adoptar decisiones que cambien la manera en la que trabajamos, buscando la colaboración multidisciplinar, lo que generalmente implica un cambio importante en términos de cultura e impactará a toda la organización.
Esta transformación data-driven de las empresas es la reorientación holística de toda la organización para gestionar, visualizar y decidir en base a datos de negocio, industria, cliente y empleados, identificando los principales insights y empoderando a los equipos para usarlos. Ahora bien, para saber qué datos tiene una compañía, dónde están y cómo se utilizan, es necesario un sistema de gestión de datos como el gobierno de datos o Data Governance.
El gobierno del dato
El gobierno de datos permite disponer de una visión integral de la información facilitando una responsabilidad compartida en las decisiones. Uno de sus objetivos principales es lograr un entendimiento común del dato.
El Data Governance concierne a cualquier individuo o grupo que tenga algún tipo de interés en cómo se crean, se recogen, procesan, manipulan y almacenan los datos, y cómo se ponen a disposición para su uso. A menudo, estas personas delegan en los equipos de IT y de gestión de datos las decisiones acerca de cómo realizar las tareas enumeradas anteriormente. Pero, algunas veces, estas actividades requieren decisiones que realmente deberían ser tomadas por grupos de interés, según los procesos acordados de toma de decisiones. Allí es cuando el Data Governance entra en juego: esa toma de decisiones es facilitada y coordinada por recursos centralizados.
¿Cómo te podemos ayudar desde Enzyme?
En Enzyme contamos con Ribosomu, una plataforma Cloud para el desarrollo, gestión y consumo de pipelines de big data desde la cual podemos crear una solución para automatizar la introducción, procesamiento y consumo de datos de tu negocio.
Contáctanos y cuéntanos tu desafío si estás buscando implementar sistemas de gestión de datos en tu negocio.