La era del PC, la era de internet, y ahora, la era de los datos
A todo aquel que le guste leer contenido de negocios o bien contenido sobre tecnología, seguramente estará cansado de oír hablar de la transformación digital y cómo convertirse en una empresa digital. No hay duda que estamos experimentando un cambio de paradigma en el mundo en el que vivimos. Muchos lo llaman la Cuarta Revolución Industrial y marcan su inicio en la introducción de internet en la década de los 90. No obstante, a mí me gusta dividirlo en múltiples eras:
- La Era del PC (1970s)
- La Era de Internet (1990s)
- La Era de los Datos (2000s)
Las dos primeras son obvias, y pocas personas pueden argumentar contra el impacto de la introducción masiva de la tecnología: primero con la introducción de semiconductores en 1975 por compañías como Intel, Microsoft o Apple y segundo con el protocolo TCP/IP en la última década del siglo XX con compañías como Google, Amazon o Facebook.
Por otro lado, la tercera, y verdadera era digital es un poco más complicada, pero no menos real. Este nuevo milenio ha traído consigo muchos cambios: internet, teléfonos inteligentes, casas y vehículos conectados e incluso industrias y oficinas conectadas que son cada día más habituales entre nosotros.
La era de los datos
¿Qué es lo que realmente sucedió en la primera década del siglo XXI que está cambiando nuestro mundo, nuestras sociedades y nuestras corporaciones?
Desde 1971 hasta 2016, la cantidad de transistores que podíamos incorporar a un circuito integrado (en un chip) se duplicó cada dos años; esto se conoce como la ley de Moore. Pero en la primera década del siglo XXI, cruzamos un umbral clave en el que el coste de almacenar datos se volvió más barato que el valor potencial de los mismos. Este cambio es lo que dio origen al Big Data y, combinado con el aumento exponencial en el poder computacional, está permitiendo el surgimiento de la inteligencia artificial (con todas sus derivadas). Finalmente, desde 2007, estamos experimentando el surgimiento de Blockchain, que no es más que un nuevo protocolo que permite que los datos sean trazables en internet.
Primero, todos obtuvimos una herramienta (el PC), luego conectamos estas herramientas a través de una red común (internet) y ahora tenemos la capacidad de rastrear cada interacción (en línea) entre diferentes herramientas y mejorarla en función de los resultados.
A pesar de ser una simplificación excesiva, es válida para comprender la importancia de los datos y su principal fuente de información en el mundo: internet.
¿Cómo se inicia la transformación digital?
Independientemente de si se está de acuerdo o no con la definición de la era digital, seguramente al lector le pueda surgir la pregunta: ¿cuáles son las implicaciones para una empresa?
Para poder afirmar que una empresa es una organización digital (o que al menos comenzó la ruta de la transformación digital) se necesita disponer de una plataforma de agregación de datos.
Quizás parezca exagerado, pero es importante entender que si actualmente no se están recopilando datos, tanto interna como externamente, sobre las interacciones digitales de sus empleados, sus clientes y sus competidores, se está perdiendo la mayor parte de las interacciones que ocurren en el mundo digital. Y al hacerlo, se está perdiendo dinero todos los días, porque los datos son valor. Podemos ir más lejos en esta reflexión: si sus competidores están por delante, ellos sí saben lo que hacen tanto usted como sus clientes. Es como si compitiera en tiro con arco en un mundo donde todos sufren miopía. Estando las gafas inventadas, no las usa porque siempre ha visto el mundo borroso; probablemente si sus competidores comienzan a usarlas estará en gran desventaja.
Agregación de datos: tu próximo paso
La agregación de datos es el primer paso para convertirse en una empresa digital, y es así, no porque no pueda llevar a cabo otras iniciativas primero, sino porque no puede esperar: cada segundo que pasa, está perdiendo datos que nunca podrá recuperar.
Así pues, y bajando a términos prácticos, dividamos este proceso en 4 pasos clave:
- Recopilación de datos internos
- Agregación de datos de fuentes externas
- Creación de un Data Lake corporativo
- Transformación de los datos obtenidos en información útil para su empresa
Datos internos:
Para recopilar los datos internos, se debe identificar dónde interactúan los empleados, dónde se crea el valor en su cadena de valor digital y donde interactúan los clientes con los sistemas de la empresa.
Agregación de datos externos:
La agregación de datos externos puede ser un poco más complicada, especialmente cuando se desea recopilar datos de competidores, ya que probablemente no sea fácil acceder a ellos. No obstante, el beneficio compensará las muchas complicaciones que puedan surgir. Se podrá conocer mejor a los clientes, a los competidores y a los clientes potenciales, a la propia organización y obtener las opiniones del mercado sobre la organización.
Data Lake corporativo:
Construir un Data Lake también es clave, ya que constituirá el supercerebro que finalmente guiará a la empresa y le permitirá ser una verdadera empresa digital. La generación de un Data Lake es fundamental porque puede cambiar el curso de la empresa, por lo tanto, vale la pena invertir el tiempo que requiere.
Cultura Data-Driven:
Finalmente, también será necesario cambiar la cultura de la empresa hacia una empresa impulsada por los datos. Esta es una necesidad y todos los departamentos eventualmente podrán beneficiarse de una mejor toma de decisiones gracias a los datos. Una vez que tenga los datos, es necesario comprender cómo usarlos.
En Enzyme Advising Group hemos ayudado a varios clientes a establecer sus Data Lakes y/o plataformas de agregación de datos. Si este artículo le ha inspirado a dar un primer paso para convertirse en una empresa de datos, una empresa digital, no dudes en ponerte en contacto con nosotros y trabajaremos juntos para ver un mundo más nítido y claro.